Coge un bol grande para mezclar y bate bien el huevo.
Una vez que el huevo esté bien esponjoso, podemos añadir la mezcla de sopa y el brócoli picado.
Remueve todo bien, prestando especial atención a que los ramilletes de brócoli queden completamente cubiertos por la mezcla de sopa y huevo.
A continuación, podemos añadir la cebolla y el queso cheddar por encima y seguir mezclando todos los ingredientes.
Por último, podemos añadir el chile en polvo y la mayonesa. Sigue removiendo un poco más hasta que quede bastante cremoso, también debe quedar un poco esponjoso.
Ahora tenemos que hornearlo, lo primero que hay que hacer es empezar a precalentar el horno a 350°F.
Engrasa una bandeja de horno lo suficientemente grande con spray de cocina, si no, utiliza aceite y un pañuelo de cocina para pintar una fina capa alrededor de la bandeja.
Transfiere todos los ingredientes a la bandeja de horno, ahora engrasada, y pon encima las 2 barritas de mantequilla. Puedes cortarlas en dados y espolvorearlas por encima antes de hornear.
Hornea durante 40-45 minutos hasta que la capa exterior esté bien crujiente y dorada. ¡Ya está listo para servir!