Los 8 mejores sustitutos del limón en conserva para tus recetas

Los 8 sustitutos del limon mejor conservados para tus recetas

Los limones en conserva no son tan comunes en Estados Unidos y Europa, pero son un alimento básico en el norte de África, y especialmente en la cocina marroquí.

Esencialmente, los limones en conserva tienen un sabor menos agudo que los limones frescos normales, y suelen estar en su propio jugo de encurtido. No son extremadamente fáciles de encontrar, pero eso no significa que no sea posible buscar alternativas sencillas para utilizar en tus recetas caseras.

A veces, el sustituto perfecto del limón en conserva puede encontrarse ya en tu armario.

Por lo tanto, asegúrate de consultar nuestra completa lista de alternativas a los limones en conserva. Sabrás más sobre este delicioso ingrediente y aprenderás a utilizarlo al máximo en la cocina.

Indice

Los mejores sustitutos de los limones en conserva

Los países del norte de África, y en concreto Marruecos, utilizan los limones en conserva en la mayoría de sus recetas, desde guisos a salsas, pasando por aderezos y tagines.

Los limones en conserva pueden añadir profundidad y brillo a tu receta y proporcionan a estos platos tradicionales su característico y delicioso sabor.

En estas recetas, es mejor utilizar limones en conserva que limones frescos, ya que añaden un tipo de sabor diferente. Los limones frescos son bastante ácidos, y añaden esa acidez al plato. Los limones en conserva aportan un sabor más intenso y decidido, gracias a su fermentación.

Los limones tardan un par de semanas en encurtirse al estar sumergidos en el líquido de encurtido. Este rasgo específico les permite tener una larga vida de almacenamiento, ya que es posible conservarlos en tu despensa hasta un año.

Y no sólo puedes utilizar los limones en conserva en tus recetas. Su jugo de encurtido también puede añadirse a tus platos si es necesario. Se puede utilizar hasta tres veces a lo largo de la vida de los limones.

Como no son increíblemente fáciles de encontrar en Estados Unidos o en los supermercados europeos, quizá te preguntes dónde puedes conseguir este delicioso ingrediente.

Pues bien, no busques más. Aquí tienes la lista completa de ingredientes que puedes poner en práctica en tu receta cuando requiera limones en conserva. Algunos de estos sustitutos de los limones en conserva son tan perfectos que ni siquiera notarás la diferencia. Saben igual que los auténticos.

Hay varias opciones, desde alternativas fáciles de encontrar hasta hacer tus propios limones en conserva en casa, ¡así que no tienes excusas!

1. Ralladura de limón

En alguna ocasión, la opción más obvia resultará ser una gran opción. La ralladura de limón puede funcionar como una fantástica alternativa a los limones en conserva.

El sabor de la ralladura de limón es un poco más suave que el del limón en conserva, ya que no ha tenido la oportunidad de fermentar en su líquido de encurtido.

Sin embargo, la ralladura es una alternativa fantástica cuando no tienes la posibilidad de utilizar limones en conserva.

Utilizar la ralladura de limón te permitirá no cambiar las cantidades en tus recetas, ya que se puede utilizar en igual proporción. O si te gusta un sabor más picante, no dudes en añadir un poco más.

2. Ralladura de limón y escamas de sal marina

Si la ralladura de limón por sí sola no hace el trabajo para tu refinado paladar, aquí tienes otro truco que puedes poner en práctica en tu cocina.

Es extremadamente sencillo: sólo tienes que mezclar la ralladura de limón con escamas de sal marina, y obtendrás una deliciosa mezcla que resaltará todo el sabor de tu comida.

Es probablemente una de las opciones más parecidas a la verdadera. Además, es maravilloso como sustituto de la cáscara de limón en conserva para todas tus recetas caseras.

3. Pieles de limón en conserva con sal

La piel de limón en conserva con sal es una solución rápida que puedes hacer en casa en un par de horas. Su sabor es bastante parecido al del verdadero limón en conserva, aunque su consistencia es un poco diferente.

Esta receta es increíblemente fácil, pero funciona mejor si la dejas reposar bien durante un par de horas (si tienes tiempo, incluso más).

Lo primero que tienes que hacer es coger un limón, o más, y exprimir el zumo de limón. Resérvalo para otra receta (o para otra fantástica alternativa de limón en conserva que sigue justo después de ésta).

Coge la piel del limón y pícala finamente. Cuanto más fina la piques, más rápido estará lista para su uso. Combina tu piel de limón finamente picada con un poco de sal fina y deja que repose durante dos o tres horas (pero, de nuevo, cuanto más tiempo repose la mezcla, mejor).

Una vez que esté lista, podrás emplearla en tus recetas. Pero ten en cuenta que, aunque el sabor será increíblemente parecido al de los limones en conserva, será un poco más suave de sabor.

Además, la consistencia y la textura de la mezcla no serán las mismas. Sin embargo, seguirá dando a tu plato un increíble sabor ácido y sabroso.

4. Zumo de limón y escamas de sal marina

¿Recuerdas el zumo de limón que obtuviste para hacer las pieles de limón conservadas con sal? Pues es hora de darle un buen uso para hacer otro fantástico sustituto de los limones en conserva.

Toma el zumo de limón y mézclalo con copos de sal marina. Esto te dará una alternativa de limón en conserva mucho más fuerte que la mezcla de cáscara de limón y copos de sal marina mencionada anteriormente.

No necesita reposar, por lo que es una alternativa inmediata para tus recetas. Pero como es razonablemente fuerte en su acidez y acidez, ten cuidado con la cantidad que vas a utilizar. A veces un poco da para mucho.

Otra cosa a tener en cuenta es su textura. Por supuesto, este sustituto tiene una textura más líquida y líquida, muy diferente de la sólida de los limones en conserva.

Por ello, utiliza este sustituto de los limones en conserva cuando sepas que la textura no será un problema y no alterará sustancialmente tu receta.

5. Pasta de limón

La pasta de limón es un sustituto fantástico, y probablemente el más cercano, del limón en conserva. Requiere un poco más de esfuerzo del habitual para hacerla en casa, pero merece totalmente la pena.

Coge uno o varios limones, según la cantidad que necesites, límpialos con cuidado y corta anillos finos. Si empleas varios limones, también puedes guardar la pasta obtenida para usarla en el futuro. ¡Es un esfuerzo único con resultados a largo plazo!

Después de cortar los limones en anillos finos, añádelos a una olla y cúbrelos con zumo de limón. Añade un poco de sal a la olla y tápalo todo mientras se cocina a fuego lento.

Al cabo de unos diez o quince minutos, la cáscara de limón debe aparecer transparente. En este momento, retira la mezcla del fuego y tritúrala con una batidora de inmersión.

Si no tienes una, simplemente pasa la mezcla a una batidora normal o a un robot de cocina y tritúrala hasta que parezca una pasta. No te preocupes si aún quedan trozos en la mezcla. Éstos darán a tu pasta de limón un sabor y una textura adicionales.

Si quieres guardar la pasta para el futuro, sólo tienes que verterla en un tarro y cubrirla con un poco de aceite de oliva virgen extra, ¡y ya está!

6. Limón Meyer y escamas de sal marina

Los limones Meyer son una variedad diferente de limones, y funcionarán de maravilla para sustituir a los limones en conserva.

Las diferencias entre un limón normal y un limón Meyer son relativamente evidentes, no sólo en la forma en que se presentan, sino también en su sabor.

En primer lugar, los limones Meyer tienen un color amarillo intenso y más oscuro tanto en su piel como en su interior. Los limones normales son en general más brillantes y mucho más grandes que los Meyer.

En cuanto al sabor, los limones Meyer son más dulces y menos ácidos que los normales. Esto funciona como una ventaja para producir un gran sustituto del limón en conserva.

El proceso es fácil, y puede ir en dos direcciones diferentes: o bien picas la piel de un limón Meyer finamente y la mezclas con escamas de sal marina, o bien exprimes su zumo de limón y lo mezclas con la sal.

Si optas por la primera opción, asegúrate de que lo dejas reposar un par de horas, para que saque todo su sabor.

Si te decides por la segunda opción, es posible utilizarla enseguida, pero siempre vigilando la consistencia y el sabor. Podría sobrecargar el sabor general de tu receta, ¡y no quieres eso!

7. Hierba de limón

La hierba de limón no es siempre el sustituto más obvio del limón en conserva, pero es una alternativa fantástica para tus recetas.

Sólo tienes que utilizar un tallo de hierba de limón e incluirlo en tu plato mientras se cocina. Le dará ese delicioso sabor ácido que necesita tu receta.

La mayoría de las veces, un tallo de hierba de limón es suficiente para sustituir la cantidad de limones en conserva que pide tu receta.

Una cosa que debes recordar una vez que hayas terminado de cocinar es que siempre debes sacar el tallo, ya que no es fácil consumirlo así. Deja que añada todo su sabor y luego sácalo justo antes de servir.

8. Limón en conserva casero

Cuando la vida te da limones, ¡haz tus propias conservas de limón! Hacer tu propia alternativa de limones en conserva puede representar una forma divertida y cómoda de experimentar en la cocina. Además, te permitirá ahorrar algo de dinero.

A continuación te explicamos cómo hacer limones en conserva caseros en 5 sencillos pasos:

En primer lugar, aclara bien los limones.

  1. Pélalos y corta la piel. No quieres trozos grandes, pero tampoco los quieres extremadamente pequeños.
  2. Espolvorea un poco de sal kosher sobre la piel picada del limón y presiona la sal sobre la cáscara del limón.
  3. Presiona bien, ayudándote quizá con el dorso de una cuchara o un tenedor.
  4. Remueve bien, asegurándote de que la piel de limón quede uniformemente cubierta por la sal kosher, y luego déjala reposar toda la noche.

Cree en el proceso, ya que cuanto más tiempo se conserve, mejor será su sabor.

Y ahí lo tienes, tu propia alternativa casera de limón en conserva.

Para darle un sabor aún más delicioso, lo mejor es utilizar limones ecológicos.

Cómo elegir un sustituto del limón en conserva

Como puedes ver, hay muchas alternativas a los limones en conserva. Todas ellas pueden añadir a tu plato ese sabor único y picante, así que el sustituto que elijas depende de tus necesidades y disponibilidad.

Si no te importa que tenga una consistencia líquida o cremosa, utiliza la pasta de limón o el zumo de limón mezclado con unas escamas de sal marina.

Si no, todas las demás alternativas servirán. Elige libremente entre la ralladura de limón sola, mezclada con unos copos de sal marina, las pieles de limón conservadas en sal, o la hierba de limón.

Puedes utilizar limones normales o limones Meyer, según tus preferencias personales. De cualquier manera, conseguirás un sabor increíble en tus recetas.

Por último, pero no por ello menos importante, si tienes tiempo libre, puedes optar por hacer tus propios limones en conserva. Es una alternativa fantástica y, además, puedes hacer una cantidad extra para guardarla y utilizarla en el futuro.

Antonella

Antonella ha trabajado como chef durante más de 10 años y ha colaborado con varios sitios web y publicaciones como escritora fantasma. Tras licenciarse en la escuela de cocina, siempre ha trabajado como chef en restaurantes de alto nivel y ha impartido clases de cocina por todo el país. Tras establecerse en California, Antonella ha puesto en marcha su propio negocio de catering y ha escrito para CookandLogic desde sus inicios, aportando sus años de experiencia en lo que respecta a ingredientes, recetas y consejos culinarios.

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